Unos de los activos más habituales en los tratamientos de medicina estética para rejuvenecer el rostro son la toxina botulínica (bótox) y el ácido hialurónico.
Son activos que tienen efectos temporales, por lo que hay que repetirlos cada cierto tiempo.
¿Para qué se utiliza la toxina botulínica?
En el caso del bótox, es una sustancia que se aplica sobre los músculos faciales cuya acción queremos disminuir. Con ello atenuamos y eliminamos las arrugas de expresión que se producen cuando gesticulamos, las arrugas de la frente y entrecejo y las patas de gallo.
Utilizamos micro agujas para su aplicación, por lo que el tratamiento es prácticamente indoloro.
¿Cuánto duran los efectos del Botox?
Entre 4 y 8 meses, dependiendo de cada paciente.Los resultados se aprecian desde la primera semana obteniendo una piel relajada y libre de arrugas.
Se recomienda que para las zonas de la frente y el entrecejo se acuda a consulta cada 6 meses.
En el caso de las patas de gallo, los efectos duran algo menos por lo que recomiendo realizar el tratamiento 3 veces al año.
¿Es mejor el uso de ácido hialurónico?
El ácido hialurónico, al ser una sustancia natural se tolera mucho mejor, hidrata profundamente llegando a las capas más profundas y promueve la producción de colágeno.
Es esencial para mantener una piel joven.
Se puede utilizar en todo el rostro tanto para tratar arrugas, como para reponer volúmenes perdidos y tensar los tejidos.
El ácido hialurónico induce una regeneración de la piel en profundidad, además del efecto de corrección e hidratación, borrando las arrugas y tensando la piel para que se vea más firme y elástica.
¿Cuánto duran los efectos del ácido hialurónico?
El efecto de corrección dura más tiempo que el bótox, alrededor de 1 año, dependiendo de la zona (para recuperar volúmenes la duración es mayor) y de la densidad del producto utilizado debido a la regeneración del colágeno y del propio ácido hialurónico en la piel.
